MÓNICA CAMACHO,tomado de la jornada de oriente
La presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso local, Zenorina González Ortega, demandó a las autoridades municipales de la capital del estado concluir la represión contra los sexoservidores, al tiempo de anunciar que el órgano legislativo que encabeza estudiará las detenciones que se han registrado en los últimos días contra personas que ejercían la prostitución, ante las acusaciones de abuso de autoridad.
A su parecer, los esfuerzos de los funcionarios deben centrarse en generar políticas públicas que regularicen dicha actividad, la cual es practicada la mayoría de las ocasiones por la incapacidad de los gobiernos para generar fuentes formales de trabajo.
“Cuando no tienes un empleo y tienes un hijo enfermo o al que mantener, muchas personas recurren a cosas no positivas, pero lo hacen por eso, por necesidad”, enfatizó la diputada priista, quien pidió no satanizar la actividad.
La madrugada del jueves pasado, agentes de la Policía Municipal de la ciudad de Puebla detuvieron y enviaron a un juzgado calificador a cinco homosexuales que practicaban la prostitución, a quienes acusaron de los delitos de “ser una molestia y un peligro para las familias”.
A este caso se suman tres denuncias presentadas contra la autoridad municipal por abuso policiaco, entre las que se encuentra la acusación de una prostituta que fue robada por agentes de esa corporación.
Al respecto, Zenorina González afirmó que es necesario estudiar las detenciones para verificar que no se hayan violentado las garantías individuales de los aprehendidos.
Ante los argumentos que esgrimieron los elementos de seguridad de que la prostitución es “una molestia y un peligro para las familias”, la diputada priista coincidió que la actividad sí es un peligro, pero por la falta de regulación, y sólo para las personas que la ejercen.
“No podemos evadir la realidad. La prostitución es un mal necesario, una necesidad intrínseca para muchas personas, por eso es necesario regularla, para combatir la transmisión de enfermedades sexuales”, apuntó.
Zenorina González consideró que es necesario también mejorar la calidad de vida de los sexoservidores, ya que no sólo ponen en riesgo su salud, sino también su seguridad y vida, ante las condiciones malsanas en las que ejercen actualmente dicha actividad.
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